Un análisis del movimiento on line, es decir, vivir pendientes de nuestros aparatos digitales o abandonar y salir al mundo off line ¿Vds., en cual se quedan, dentro o fuera, internet o la carretera?
«Divididos por el mundo digital», por John Horvat para TheImaginativeConservative
Traducido por Cesar Augusto para Marchando Religión
Pueden leer el artículo original en el siguiente enlace: https://theimaginativeconservative.org/2019/04/real-digital-divide-john-horvat.html
Hubo un tiempo, hace décadas, donde el mundo estaba dividido entre aquellos que estaban en línea y fuera de línea. La gente rica podía permitirse los nuevos y brillantes dispositivos que los conectaban con todos. Los pobres se quedaban en un baldío análogo en el otro lado de la división digital. Los luchadores de justicia social de aquel entonces demandaron el acceso a internet como un derecho humano fundamental.
Los tiempos han cambiado, pero a la vez permanecieron casi iguales. El mundo sigue dividido entre aquellos en línea y fuera de línea. Las pantallas están ahora en todas partes, y la mayoría de gente pobre tienen los dispositivos necesarios para conectarlos con el mundo virtual.
Sin embargo, los ricos ahora están separándose de sus aparatos e insistiendo en encontrarse personalmente con gente real. Vivir fuera de línea es ahora un símbolo de estatus y un lujo cuando los ricos rechazan unirse a las masas en línea e insisten en la interacción humana. El New York Times anotó recientemente que el «contacto humano es ahora un bien de lujo». Los luchadores de justicia social ahora demandan que los pobres sean liberados de la opresión digital.
Un mundo de pantallas.
Modas y tendencias van y vienen, mostrando que tan vacías e insignificantes son. Los liberales, por otra parte, permanecen iguales ya que nunca pierden una oportunidad para promover sus narrativas de lucha de clase. Opresión significaba tener pocos computadores. Ahora es tener muchas pantallas.
De hecho, las pantallas están por todos lados. Están reemplazando a los humanos en restaurantes, tiendas, salones de clase, y hospitales. La estructura del internet conecta todo con todo. Nuevos asistentes de inteligencia artificial ahora hablan convincentemente con los usuarios. Autos que se conducen solos están a la vuelta de la esquina. Correo electrónico, Internet, y GPS son gratis y disponibles para todos.
Pareciera que todos deberían querer participar de este nuevo y valiente mundo que hará todo más fácil, rápido y automático. Todo esto debería hacerlos a todos más felices y más iguales. Pero, hay algo inquietante con este nuevo escenario de pantallas que está causando la nueva división digital.
Algo no funciona On line
El indicador que algo está mal es que los niños de los ejecutivos de Silicon Valley están asistiendo a escuelas de baja tecnología. Sus padres los mantienen lejos de las tabletas digitales que ellos crearon e insisten que los niños jueguen con bloques de construcción. Los tecnócratas saben algo que el resto del mundo no sabe.
Un estudio fundamental de 11000 niños apoyado por los Institutos Nacionales de Salud (NationalInstitutesofHealth) está encontrando que la sobre-exposición a las pantallas es perjudicial al desarrollo cerebral y puede causar depresión y estrés. Adicionalmente, compañías de alta tecnología y gigantes de redes sociales están usando técnicas psicológicas y datos neurológicos para encontrar formas de mantener a los jóvenes en línea y adictos a sus pantallas.
Los niños no son los únicos afectados por esta adicción. Los adultos están también pegados a sus pantallas y adictos a las redes sociales. Estudio tras estudio muestra como las redes sociales proyectan una imagen irreal de la persona, que siente el estrés de vivir alcanzando esa imagen. El preocupante libro «TheShallows» (Los Vacíos) del periodista Nicholas Carr, documenta la manera que la sobre-exposición a las pantallas está reconectando el cerebro humano para disminuir las experiencias de «formas humanas de empatía, compasión, y otras emociones”.
Por mucho que la gente le fastidie admitirlo, el mundo de las pantallas está lastimando individuos y a la sociedad. Las pantallas podrían convertirse en las nuevas crisis del tabaco y el opio ya que las compañías de alta tecnología están involucradas en promover comportamientos adictivos en detrimento de la persona y la comunidad.
Salir del movimiento On line.
Por tanto, hay un rechazo hacia la intrusión cibernética en las vidas diarias. Frente al estrés en línea muchos estás buscando maneras para hacer sus experiencias más humanas. Gente más acaudalada ahora prefieren viajes por entretenimiento, educación, y cenas en vez de gastar más en nuevos y brillantes dispositivos para ocupar sus vidas.
De repente, los medios están diciendo que cualquier cosa que involucre el toque humano está de moda. Vivir sin pantallas, redes sociales, y correo electrónico puede ser un símbolo de estatus entre ciertos sectores de los acaudalados, que no necesitan estar en línea. La interacción humana llamativa señaliza su habilidad de pagar por más humanamente intensas experiencias lejos de las virtuales, y muy solitarias, cyber-multitudes.
Una Elección Simple y sin costo.
Tal conclusión es falsa y engañosa. Mientras que el impulso por conectarse a pantallas de computadores involucró grandes sumas de dinero en los días tempranos, el esfuerzo por desconectarse no costaba nada.
La decisión por desconectarse de conexiones innecesarias puede decidirse por un simple y sin costo «no». «FaceTime» con otros es tan fácil como mirar un iPhone. Salirse del secuestro de las redes sociales esta siempre a unos clics de distancia
Si bien nadie puede estar del todo fuera de línea en estos días, cualquiera puede salirse de las peores partes del mundo digital. Cualquiera puede llenar el vacío con verdadero ocio, conversación, oración o silencio. Esas cosas, como el Internet son gratis y accesibles para todos.
Aquellos que Admiran lo Bueno, lo Verdadero y lo Hermoso.
El mundo no está dividido entre aquellos en línea y fuera de línea. Modas y tendencias vienen y van, y ellas no pueden servir como verdaderas divisiones de la sociedad.
Es mucho mejor decir que el mundo siempre ha estado dividido entre aquellos quienes aman y admiran lo bueno, lo verdadero y lo hermoso, y quienes no. Esos últimos se permiten a sí mismos ser tomados por la frenética destemplanza de la época. Ellos persiguen cada locura que esté de moda. Ellos cambiarán de una manía a otra para impresionar a los demás o complacer sus pasiones. Ellos estarán siempre sin descanso.
Los admiradores de la verdad se permiten a sí mismos ser tomados por el amor de Dios, la Verdad Quien no puede engañar ni ser engañado. Ellos siempre encontrarán formas de llenar sus vidas con significado y propósito. Ellos encuentran paz en el silencio y soledad de sus corazones, lejos de la agitación de los tiempos.
John Horvat para TheImaginativeConservative
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